Locho Morán títere de Fernando Moreno Peña
Finalmente se terminó el idilio entre azules y naranjas, en esa relación en la que prevaleció el interés de unos cuántos por encima del interés general de partido y sobretodo el de la ciudadanía y en ese sentido, egoísta como es su costumbre, Leoncio Morán se dispone a hacerle el juego al PRI de Ignacio Peralta y compañía.
El primer mandamiento para Morán Sánchez en sus convicciones endebles es aquel que dice Amarás a Fernando Moreno por sobre todas las cosas y un segundo que le indica No Estorbarás a tu Patrón Porque a él y sólo a él Debes Obediencia y Sumisión.
Hace doce años, el ex alcalde capitalino entonces panista, declinó en sus aspiraciones de convertirse en senador y a medio camino, se bajó de la fórmula que encabezaba Marta Leticia Sosa Govea, por lo que su espacio fue ocupado por Jesús Dueñas Yerenas.
¿Por qué no quiso competir Locho?
Sencillamente porque en aquella ocasión, en la fórmula priista que encabezaba Rogelio Rueda, estaba en la segunda posición Hilda Ceballos, esposa del ex gobernador de Colima Fernando Moreno Peña, el titiritero que mueve a la marioneta que hoy se ostenta como el dueño de la franquicia de Movimiento Ciudadano en nuestro estado.
En 2018, esta misma historia vuelve a repetirse, en la coalición Por Colima al Frente, conformada por el PAN, PRD y MC, se acordó que a estos últimos les correspondería la primera posición al senado, en tanto el segundo lugar recaería en Acción Nacional.
Por algunos días Locho era el candidato al Senado en esa primera posición que automáticamente lo convertía en legislador federal aun perdiendo, pero algo ocurrió en el camino, la alianza PRI-PVEM, postulaba a Gabriela Benavides y a Fernando Moreno para competirle al frente y equilibrar la balanza con una ex panista y un cartucho quemado dentro y fuera del territorio colimense.
Ante esa noticia, Leoncio sumiso y fiel a FMP, abandona la candidatura, misma que dejó en manos de la regidora capitalina María Elena Abaroa, quien es reconocida en el municipio por su extremado protagonismo con dotes histriónicos más que por sus acciones con impacto positivo en favor de la ciudadanía.
A sabiendas de que la regidora Abaroa era ya senadora de primera minoría, Movimiento Ciudadano no estaba obligado a realizar campaña en la disputa por los dos escaños en la cámara alta de México, por el contrario, el obligado era el PAN a quien le cambiaron la jugada y ahora tenían trabajo, fortalecer a la fórmula para hacerla más competitiva y que su candidato tuviera posibilidades reales de convertirse en legislador.
Esa fue la maniobra de Locho, para no estorbarle a su patrón, optó por una diputación federal por la vía plurinominal y así mataba dos pájaros de una pedrada, sería legislador por tres años sin hacer campaña, además de dejarle el camino libre a aquél que ya no sé si respeta o teme.
Otra orden para Locho, como no encuentran la manera de frenar al presidente municipal de Colima Héctor Insúa, el fin de semana pasado el PRI-GOBIERNO y el PRI-PARTIDO, se decidieron a jugar su última carta, reventar el frente en el estado y enviar al diablo para que desate un infierno electoral en la capital.
El lunes pasado, el coordinador estatal de Movimiento Ciudadano se presentó en el ayuntamiento, a solicitar la documentación correspondiente, con vísperas a contender por la alcaldía, e intentar frenar el crecimiento de Insúa García quien ya aventaja por mucho a Morán Sánchez con trabajo acreditado al frente del municipio.
Igual que en 2015, volvemos a conocer el verdadero rostro de Locho, el del capricho por encima del interés común, su excesivo egoísmo y lo que es peor, funge como alfil de un sistema que ha criticado de dientes hacia afuera, “inestable”.
Ni hablar, así es él, y en buena hora se dan estos sucesos, que permitirán a la ciudadanía discernir las verdaderas intenciones de personajes como Leoncio Morán y Fernando Moreno Peña.
Mi óptica
El más beneficiado con la salida de MC del frente, es el PAN, ya no lidiará con campañas a medias, no pugnará contra las traiciones a las que estaba expuesto con el enemigo en casa, y se abrirán los espacios que los naranjas dejarán vacantes para panistas de verdad.
Por cierto
Para dividir el voto y descarrilar a Héctor Insúa, Nacho Peralta manda a Walter Oldembourg, porque no hayan la puerta con el actual alcalde y padecen la ausencia de liderazgos en el tricolor.
De Walter Oldembourg Ochoa podemos decir que se le conoce por ser el dirigente de la CANACO SERVITUR en la ciudad, por la manifestación que llamó a la paz en el jardín Libertad, un férreo luchador social, (sólo de palabra), porque cuando alza la voz para reclamar sobre el tema de la inseguridad, se cuida de que no esté presente el gobernador porque de frente a Nacho, le da frío y se ocupa de golpear a actores políticos siempre y cuando no formen parte del proyecto de Peralta Sánchez.