De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), los factores que favorecen la obesidad tienen que ver con el estilo de vida, el consumo de más calorías de las necesarias, una alimentación deficiente y la falta de ejercicio.
En este sentido, el doctor Ricardo Hernández Trejo, director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) No. 18 en la Oficina de Representación Colima del IMSS, detalló que se otorga orientación y educación a derechohabientes sobre la necesidad de desarrollar alguna actividad física.
Con esto se busca concientizar a la población acerca de los beneficios al realizar ejercicio por lo menos tres veces a la semana, con sesiones de 30 minutos, y llevar una alimentación más sana, que incluya frutas, verduras y alimentos integrales.
Los factores que favorecen la obesidad tienen que ver con el estilo de vida, el consumo de más calorías de las necesarias, una alimentación deficiente, con elevada ingesta de productos industrializados y, por supuesto, la falta de ejercicio, puntualizó.
Destacó que, independientemente de la edad, desde niños hasta adultos mayores, todas las personas tienen que llevar un programa de ejercicio adecuado a sus condiciones físicas que se traducirán en una mejor calidad de vida. Esta rutina, además, puede reducir el estrés, aliviar la depresión y la ansiedad, estimular la autoestima y mejorar la salud mental.
Hernández Trejo explicó que el sedentarismo es la ausencia de actividad física, es decir, no realizar algún tipo de ejercicio, y que es un factor de riesgo que puede propiciar el desarrollo de varias enfermedades.
La combinación del mínimo esfuerzo y un alto consumo de calorías, especificó el especialista del IMSS, endurecen paulatinamente los vasos sanguíneos y atrofian los músculos, por lo que al paso de los años se presentan enfermedades como hipertensión, ateroesclerosis y diabetes, que culminan en enfermedades cardiovasculares y/o cerebrovasculares.
Refirió que el sedentarismo es el principal factor que favorece el sobrepeso y la obesidad en México. En los últimos ocho años, el porcentaje de personas mayores de 20 años con este problema pasó de 60 a 70 por ciento de la población y aludió que se estima que solamente 10 por ciento de la población mexicana realiza alguna actividad física.
Detalló que las actividades diarias que incluyen subir o bajar escaleras, o caminar un poco, no significa que se esté cumpliendo con los criterios de activación física.
Subrayó que los beneficios de realizar actividad física y alimentación saludable son:
- Te hace ver mejor, repercute en tu autoestima y seguridad personal.
- Tus músculos son más fuertes, corrige tu postura y previene los dolores de articulaciones y de espalda.
- Los huesos se fortifican, reduce el riesgo de osteoporosis (descalcificación de los huesos).
- Baja los niveles de azúcar y grasas en la sangre.
- Te ayuda a bajar de peso y a reducir el riesgo de presión arterial alta y diabetes mellitus.
- Mejora la circulación sanguínea y reduce los niveles de colesterol.
- Ayuda a prevenir enfermedades del corazón.
- Disminuye la tensión nerviosa y la depresión, además, favorece el aprendizaje y la sensación de bienestar
La alimentación sana es la base de una buena salud junto con el consumo de agua simple y la práctica diaria de actividad física; esta combinación es la mejor manera de prevenir y controlar el sobrepeso, obesidad y otras enfermedades, como la diabetes y presión alta, abundó.
El director de la UMF No. 18 compartió algunas recomendaciones para una alimentación sana y la práctica de ejercicio:
- Iniciar con 10 minutos al día y poco a poco aumentar el tiempo o número de repeticiones del ejercicio, hasta llegar a un mínimo de 30 minutos diarios.
- Si tienes alguna enfermedad crónica, se recomienda consultar antes al médico para que sugiera el ejercicio adecuado.
- De preferencia, realizar ejercicio tres horas después de haber comido.
- Utilizar ropa cómoda y calzado adecuado.
- En caso de sentir fatiga, mareo, dolor o falta de aire, suspender poco a poco el ejercicio y consultar al médico.
- Si estás embarazada, pregunta a tu médico sobre el tipo de ejercicio y la intensidad recomendada.
Es muy importante tener una alimentación sana a lo largo de toda la vida, por lo que el IMSS recuerda que las sugerencias para una ingesta correcta están representadas gráficamente en el Plato del Bien Comer (www.imss.gob.mx/salud-en-linea/platobiencomer), que muestra los tres grupos de alimentos:
- Verduras y frutas: principal fuente de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra dietética.
- Cereales y tubérculos: principal fuente de hidratos de carbono.
- Leguminosas y alimentos de origen animal: principal fuente de proteínas.
En las Unidades de Medicina Familiar se cuenta con programas preventivos y estrategias con el objetivo de evitar o reducir los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares, enfatizó.
El IMSS hace un llamado a la población a evitar o reducir los factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares y a efectuar revisiones médicas periódicas en la UMF de su adscripción.