Una joven madre de Monterrey contó que, tras contraer COVID-19, su leche materna cambió de color. Mientras luchaba contra el coronavirus, su leche se tornó verde neón.
En entrevista con Mirror, Anna Cortez, de 23 años, narró cómo afectó el COVID-19 el color de su leche materna, cuando ella y su bebé se contagiaron de coronavirus el pasado mes de enero.
Anna perdió el gusto y el olfato, síntomas que indican COVID-19. En su caso, su leche materna adquirió un tono verde neón pálido.
Esta situación la hizo consultar a la pediatra. Sin embargo, la doctora le dijo que no se preocupara, ya que el cambio de color se debía a que sus anticuerpos estaban combatiendo la infección.
“Hablé con la pediatra de mi hija, que también es asesora en lactancia, y me dijo que es común que cuando la madre se enferma o cuando la bebé se enferma con un resfriado o un virus estomacal, la leche de la madre cambie y se adapte a los anticuerpos.
La razón por la que fue tan notorio en este caso es porque el virus es muy fuerte.”
Anna contó que su hija, Mikayla, de cuatro meses, tuvo fiebre y tos, pero se recuperó pronto del COVID-19.
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