El investigador de la Facultad de Medicina de la UdeC dictó la conferencia: “La resistencia bacteriana, ¿un jinete del apocalipsis en la salud?”
Como parte de las Charlas de Café que realiza la Coordinación General de Investigación para conmemorar 40 años de hacer ciencia en la Universidad de Colima, esta semana se llevó a cabo la conferencia: “La resistencia bacteriana, ¿un jinete del apocalipsis en la salud?”, a cargo del Dr. Fabian Rojas Larios, profesor-investigador de la Facultad de Medicina.
En su conferencia, explicó que la resistencia bacteriana es la capacidad de las bacterias para sobrevivir y reproducirse en presencia de agentes antimicrobianos que normalmente inhibirían su crecimiento o las matarían, esto causado por el uso excesivo o inapropiado de antibióticos, así como por la falta de medidas adecuadas de prevención y control de infecciones.
Destacó que esta resistencia bacteriana “puede llevar a infecciones graves y mortales que son difíciles de tratar y que ponen en peligro la vida de pacientes en todo el mundo”, mencionando que las bacterias conformadas por el grupo ESKAPE, son un grupo de microorganismos que representan un serio peligro para la salud mundial, al ser consideradas como súper bacterias resistentes a los antibióticos.
Reveló que dicha resistencia “se debe a las mutaciones genéticas, toda vez que transmiten esa característica a través de transposones [secuencia de ADN capaz de replicarse e insertar una copia de sí misma en un nuevo lugar del genoma] que contienen los genes de resistencia, pero también puede incidir la permeabilidad en la pared celular y la producción de enzimas que degradan los antibióticos”, entre otros factores.
Ante este hecho, preciso el médico, las organizaciones e instituciones de salud buscan nuevas terapias y tratamientos para las ESKAPE, entre ellas el desarrollo de nuevos antibióticos, el uso de combinaciones de antibióticos, así como la inmunoterapia y las terapias basadas en fagos [virus que infectan exclusivamente a las bacterias].
Indicó que este hecho representa “un serio impacto en la salud pública”, ya que según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la resistencia bacteriana es una de las mayores amenazas para la salud en todo el mundo, al estimar que para el año 2050 podría causar hasta 10 millones de muertes por año.
Finalmente, concluyó, “las personas debemos hacer un uso racional de los antibióticos, ya que es uno de principales factores para prevenir y controlar la resistencia bacteriana, así como implementar medidas efectivas de control de infecciones en los hospitales y centros de atención médica”.