*“Implementar los nuevos paradigmas implica ajustes estructurales y aprender que tenemos que hacer las cosas diferentes. Lo que sí está claro es que hay cosas que ya tenemos que comenzar a hacer, con o sin esta evaluación”: Christian Torres Ortiz, rector.
En reunión de trabajo a la que asistieron funcionarios y directivos de planteles de la Universidad de Colima (UdeC), el Dr. Carlos Eduardo Monroy Galindo, secretario técnico de la casa de estudios, compartió algunos resultados de la autoevaluación realizada el año pasado, propuesta a nivel nacional por el nuevo Sistema de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior (SEAES).
La reunión, que se llevó a cabo en el auditorio de la Facultad de Enfermería, estuvo presidida por el rector, Christian Torres Ortiz Zermeño. Lo acompañaron Susana Aurelia Preciado Jiménez, coordinadora general de Docencia y Rogelio Pinto Pérez, coordinador de Planeación y Desarrollo Institucional.
El SEAES es un mecanismo de evaluación de la calidad en instituciones de educación superior del país. Está a cargo de la Comisión Nacional de Evaluación de la Educación Superior (CONAES), un organismo público descentralizado de la Secretaría de Educación Pública (SEP).
Sus objetivos son: Evaluar la calidad de los programas educativos y las instituciones de educación superior, Acreditar los programas educativos y las instituciones de educación superior que cumplan con los estándares de calidad establecidos y Promover la mejora continua de la calidad de la educación superior en México.
Esta evaluación se realiza mediante un proceso que incluye una Autoevaluación: La institución de educación superior realiza una autoevaluación de sus programas educativos y su funcionamiento general, y una Evaluación externa: Un grupo de pares externos evalúa la autoevaluación de la institución y realiza visitas de campo a la misma.
También incluye la Emisión de un dictamen: La CONAES emite un dictamen en el que se establece si el programa educativo o la institución de educación superior cumple con los estándares de calidad establecidos.
En respuesta a la convocatoria del Sistema de Evaluación y Acreditación de la Educación Superior, la UdeC participó de manera voluntaria en la realización y entrega de un reporte de autoevaluación institucional la cual incluye el ámbito institucional, los programas de licenciatura, la investigación y el posgrado, la profesionalización docente y la formación profesional mediante los siguientes criterios: responsabilidad social, equidad y género, inclusión social, excelencia, vanguardia, innovación social e interculturalidad.
Monroy Galindo detalló que la UdeC creó un comité para coordinar el proceso de autoevaluación, en el que participan representantes de todas las áreas de la institución. “Los lineamientos del SEAES le dan un nuevo significado al proceso de evaluación y mejora continua. El reporte debe incluir tres componentes: Qué hace la Universidad, cómo lo hace y por último debe hacer un análisis de esos resultados comparados con los indicadores del Sistema”.
Compartió que el documento que se envió el pasado mes de febrero contiene un mapeo de mecanismos, estructuras y estrategias de evaluación y mejora continua, así como el análisis del funcionamiento de dichos mecanismos y de los procesos de evaluación y mejora de los ámbitos en función de los criterios transversales.
Destacó que este nuevo sistema, que aún no es obligatorio, “implicará un nuevo cambio de paradigma en el que debemos centrar nuestra atención, ya no sólo en los logros y acciones sino también en los impactos que generamos derivado de ello. En cuestiones de procesos de evaluación, debemos migrar de medir cuantitativamente a hacerlo además de manera cualitativa y ver a los usuarios más bien como destinatarios”.
Al tomar la palabra, el rector Christian Torres Ortiz agradeció el trabajo llevado a cabo por el Comité, así como a las dependencias que participaron, resaltando la buena labor realizada al haber entregado el reporte en tiempo y forma. “He insistido mucho sobre la necesidad de identificar los esfuerzos que hacemos en la Universidad para no duplicarlos y focalizar el esfuerzo en un proyecto o programa institucional. La autoevaluación nos arroja precisamente eso; la integralidad y la sistematización de los procesos”.
Otro hallazgo de la autoevaluación que consideró importante, dijo, “es que debemos de transitar de una idea de usuario a otra de destinatario, esto es fundamental en todas las acciones, proyectos e ideas que desarrollemos en la Universidad”.
En ese sentido, “lo que puede suceder es que disminuyamos de manera cuantitativa las acciones que realizamos, pero que sean mucho más fuertes cualitativamente hablando, para así poder tener absolutamente claro los impactos. Una palabra en la que insiste mucho el SEAES es el impacto social; el impacto social es una responsabilidad natural intrínseca a una universidad pública en este país”.
Para terminar, adelantó que “implementar los nuevos paradigmas implica ajustes estructurales y aprender que tenemos que hacer las cosas diferentes. Lo que sí está claro es que hay cosas que ya tenemos que comenzar a hacer, con o sin esta evaluación”.