*Egresa Facultad de Contabilidad y Administración de Colima a una generación profesionistas capacitados para hacer de México un mejor país.
Recibieron su certificado de titulación 22 jóvenes de la Facultad de Contabilidad y Administración de la Universidad de Colima, campus central, durante un acto protocolario celebrado en el auditorio “Carlos de la Madrid Virgen”, al que asistieron también amigos, profesores y familiares de los egresados.
Además, como nuevos profesionistas tomaron protesta 31 egresados, 18 de ellos del programa educativo de Contador Público y 13 de la Licenciatura en Administración; los primeros son egresados de la generación 2013-2018 y el resto de la generación 2014-2019.
En la titulación resaltaron el esfuerzo de los jóvenes Esmeralda de la Teja Espíndola y Alexis Chávez Torres, quienes obtuvieron desempeños académicos de sobresaliente en el Examen General de Egreso (EGEL), con 9.5 y 9.0 de promedio, respectivamente.
Para dirigir el acto protocolario de toma de protesta, sus profesores Sergio López, Teodoro Reyes y Humberto Baltazar fungieron como sinodales, y como presidenta estuvo la directora del plantel, Lorena Hernández Ruiz.
En su mensaje, Lorena Hernández señaló que cada egresado pronunció su último “presente”, agregó que todos han cubierto la totalidad de sus créditos y que, “por sus excelentes resultados, se han convertido en una muy buena estadística para este plantel”.
Por su parte, Sergio López Jiménez señaló que deben sentirse contentos y orgullosos por lo alcanzado, y puntualizó que “nuestro país, en estos momentos, requiere de gente honesta y que se conduzca con estricto apego al código de ética profesional”. En ese sentido, les recordó que “de aquí en adelante tendrán la responsabilidad de llevar en alto el nombre de la Facultad de Contabilidad de Administración y de la UdeC”.
Después de recibir cada uno su acta certificada de titulación, Esmeralda de la Teja habló en representación de sus compañeros, agradeciendo a directivos y profesores por el apoyo y enseñanza transmitida, así como a los compañeros, jefes de grupo, a su familia y a Dios.
Propuso a sus colegas esforzarse “para no quedarse fijos ni ser conformistas y ser personas de valor. Donde sea que trabajemos seamos íntegros, porque un título no tendría sentido si terminamos dañando a la sociedad”.
Por último, habló de la actualización permanente, de que “el mundo es cambiante y surgen nuevos conocimientos y tecnologías”. Así, agradeció a la Universidad de Colima porque “hoy nos convertimos en su más grandioso acervo”.