Evolución de las finanzas públicas será uno de los focos de atención para inversionistas en 2021

Las finanzas públicas del país iniciaron el año con un margen de maniobra estrecho y con cifras deterioradas, aseguró el Grupo Financiero Monex.

Luego de que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dio a conocer ayer el Informe de Finanzas Públicas y la Deuda correspondiente a enero, el análisis de la firma financiera apuntó:

“La evolución de las finanzas públicas será uno de los focos de atención para los inversionistas a lo largo de 2021, pues en el año se resentirán las presiones derivadas de una demanda interna más deprimida, así como de la merma en los fondos de estabilización”.

Según la SHCP, en enero se aportaron 7 mil 546.9 millones de pesos al Fondo de Estabilización de los Ingresos Presupuestaros (FEIP) y 2 mil 195.4 millones de pesos al Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF), a fin de construir nuevos ahorros para enfrentar contingencias.

De esta manera, añadió, las cifras de enero plantean un escenario riesgoso en el corto plazo, sobre todo porque en febrero y marzo los ingresos resentirán la aplicación de estímulos fiscales a los combustibles.

Para el primer mes del año, el balance público tradicional fue deficitario por un monto de 8 mil millones de pesos, mientras que el balance primario, que excluye los costos del financiamiento, fue superavitario por 51.7 mil millones.

Uno de los focos rojos fue en los ingresos, que se vieron mermados por la pandemia.

“La caída fue tan pronunciada debido a la complicada base de comparación que representó enero de 2020, mes en el que la recaudación de ingresos tributarios se benefició por la menor cantidad de devoluciones y compensaciones”, explicó Monex.

No obstante, respecto a la cifra proyectada en la Ley de Ingresos 2021, varió en -2.9%, debido al desplome del 37.0% en los ingresos petroleros, detalló.

De hecho, la producción contemplada para el primer mes del año era de mil 935 millones de barriles diarios, pero el resultado fue de sólo mil 649 millones, lo que implica una caída de 3.3% respecto a 2020.

Por el lado del gasto se registró la cuarta contracción anual en los últimos cinco meses y la más profunda en los últimos 20 años.

Uno de los pocos rubros con crecimiento significativo fue el de salud, que tuvo un aumento de 26.0%, lo que refleja el reordenamiento y las limitaciones que la pandemia ha impuesto sobre las finanzas públicas, aunque la comparación anual se ve beneficiada por el subejercicio que dio en esta materia a principios del año pasado.

CON INFORMACIÓN DE PROCESO.

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