*“La luz es posible hasta en un bosque lleno de oscuridad, de eso se trata la novela, de cómo Anna Ajmátova lo logró con la construcción de una voz poética que no es un estilo ni una manera de hacer las cosas, sino una manera de estar en el mundo y que eso sea reconocido aquí, hoy, provoca todo mi agradecimiento”: Alberto Ruy.
“Expresamos nuestro reconocimiento a esta casa de estudios por tener lo cultural como un eje fundamental del quehacer universitario; la tradición que tienen en la danza, la música y en muchas otras disciplinas expresa este compromiso”, aseguró Lucina Jiménez López, directora del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), durante la ceremonia en la que tanto este organismo federal como la Universidad de Colima le otorgaron el Premio Narrativa Colima por obra Publicada al escritor Alberto Ruy Sánchez..
Lucina Jiménez resaltó los 42 años de colaboración entre la UdeC y el INBAL a través de la entrega de este premio; “hoy, estamos entregando el premio a un gran escritor, un gran narrador, poeta, editor y un comprometido amante de México; le agradecemos su generosidad, porque él nos ha ayudado, desde su propia poética, a acercarnos al deseo, al erotismo y a la sensibilidad de muchos de sus personajes entrañables que nos conectan incluso con culturas más allá y es, gracias a sus textos, que hemos podido adentrarnos a muchas filosofías y maneras de entendernos como parte de un mundo diverso”.
Por último, dijo que la obra premiada: “El expediente Anna Ajmátova” es fascinante “porque es la estética de la palabra y la capacidad de narrarse a sí mismo, sin traicionarse en esa vocación de decir lo propio; este premio es un signo de que la literatura de Alberto Ruy Sánchez sigue transformándonos y ayudándonos a entendernos en este mundo diverso y contradictorio en donde la palabra, el diálogo y las conversaciones son la única manera de enfrentar los demonios del poder, del totalitarismo desde esa luz interna”.
En ceremonia realizada en el salón del vitral de la Pinacoteca, Alberto Ruy Sánchez recibió el premio Narrativa Colima 2022 de manos del rector, Christian Jorge Torres Ortiz Zermeño y de Lucina Jiménez López, directora general del INBAL. Con este evento dieron fin las actividades de la Feria del Libro Altexto 2023.
El Premio Bellas Artes de Narrativa Colima para Obra Publicada surgió en 1980 bajo el nombre de Premio Latinoamericano de Narrativa Colima, para reconocer la calidad literaria de obras ya publicadas por autoras y autores nacionales o extranjeros, enfocadas en el género narrativo.
En su discurso, el rector Christian Torres Ortiz señaló que, con esta obra, “el autor nos recuerda el papel y la fuerza del lenguaje escrito, especialmente el creado por una mujer, y nos reafirma a la literatura como herramienta de expresión frente a la represión o la belleza; creaciones de esta naturaleza renuevan la convicción y el compromiso de las instituciones convocantes a este premio, para darle continuidad como parte de la función sustantiva de difusión y preservación del arte y la cultura que tenemos”.
El premio, agregó, “nos alienta como casa de estudios a seguir promoviendo la lectura como elemento esencial para la formación de las juventudes y la generación del conocimiento y a continuar con la organización de la Feria del Libro Universitario Altexto, que por 25 años hemos realizado con la idea de abrir nuevas oportunidades de acceso para la comunidad universitaria y en general de la entidad, a las obras literarias”.
Antes de concluir, el rector agradeció al INBAL por más de 40 años de trabajo conjunto, al jurado calificador, al escritor galardonado y a las dependencias universitarias que sumaron esfuerzos en la organización de este evento.
La Estudiante María Ochoa Morfín, de sexto semestre de la licenciatura en Letras Hispanoamericanas, fue la encargada de comentar el libro premiado: “se trata de una novela dialógica que recalca el poder que tienen la poesía, el arte y la sensibilidad para transformar la realidad, nuestras vidas, así como la importancia de encontrar la propia voz para invocar al fuego, haciendo verdadera alquimia de la experiencia humana”.
Su trabajo fue una muestra de análisis literario, que el propio Alberto Ruy elogió por su brillantez.
La lectura del acta del jurado calificador, con la cual se otorgó este premio a Ruy Sánchez, fue leída por Carlos Alberto Ramírez Vuelvas, coordinador general de Extensión. Ese texto destaca que la obra “es una novela con un lenguaje preciso y poético y parte de un ejercicio de biografía con una estructura adecuada para la temática que trata; es una reflexión profunda sobre el acto poético y sobre el poder de la palabra frente al poder político; es un texto narrativo que no solo tiene méritos estéticos sino que resuena con la realidad actual. Es una combinación acertada de crónica, ensayo y narrativa y una novela que atrapa de inmediato al lector por la buena construcción de los personajes, una prosa fluida y una investigación seria”.
En su intervención, Alberto Ruy agradeció el premio otorgado por la Universidad de Colima y el INBAL: “siempre he creído que las cosas más importantes de la vida suceden por azar y la confluencia de factores. Primero, la confluencia del Instituto de Bellas Artes y Literatura con la Universidad de Colima, dos instituciones que son excepcionales en el mundo y en México por la creación de ámbitos en donde la creatividad puede florecer, algo que no sucede en todas partes. Por otra parte, la confluencia con la Universidad de Colima nos ilumina, a mi esposa y a mí, especialmente, al igual que Colima y su cultura”
El escritor comentó que el oficio de escribir se aprende de manera fundamental de las llamadas artes aplicadas; “uno aprende a escribir no solo de la literatura sino también de la música, de las personas y de las técnicas sofisticadas de las artes aplicadas”.
Por último, el autor señaló que el reto más grande en su novela fue mostrar cómo es posible crear en las situaciones más adversas; “es decir, la luz es posible hasta en un bosque lleno de oscuridad, de eso se trata la novela, de cómo Anna Ajmátova lo logró con la construcción de una voz poética que no es un estilo ni una manera de hacer las cosas, sino una manera de estar en el mundo y que eso sea reconocido aquí, hoy, provoca todo mi agradecimiento”.
También estuvieron en el presídium Joel Nino, secretario general de la UdeC; Ana Karina Robles, directora general de Publicaciones; Ana Lilia Moreno, directora general de Servicios Estudiantiles y Ada Aurora Sánchez, directora de la FALCOM.