Algunos políticos mezquinos de Colima han encontrado en la caseta Cuyutlán, de la autopista Armería-Manzanillo, una botín político-electoral que les ha ayudado para mantenerse en el poder cada tres años.
Asi lo manifestó el Movimiento Yo sí soy Colima tras pedir a los ciudadanos reflexionar sobre el tema , pues consideran que resulta extraño que ahora el diputado por el Partido Verde Ecologista, Nabor Ochoa López, intente sacar raja política del tema para seguir vigente.
Mencionaron que así lo hizo en el pasado desde el PAN y el PRI.
Expusieron que es una maniobra astuta para manipular al electorado, ya que él mismo conoce que no se puede cerrar la caseta por una razón muy sencilla: la autopista opera dentro del marco legal y es de suma importancia para el Tratado de Libre Comercio y la economía de esta región.
Indicaron que en medio de señalamientos por incitar al desorden y al vandalismo en reuniones con grupos de choque y los diputados Luis Humberto Ladino y Leticia Zepeda, también involucrados en las tomas ilegales de la caseta Cuyutlán, no se ha conformado con prometer, con fundamentos erróneos y demagogia, la caída de una concesión carretera, sino que ha amenazado desde el Congreso colimense que a partir del 8 de julio ni la Policía Federal podrá detener sus ambiciones políticas.
No obstante, la situación complicada en materia de seguridad que vive el Estado, lamentaron que el también candidato del PVEM a la diputación por la vía plurinominal busca deslegitimar a los policías y retirarlos de sus tareas, pasando por alto su protesta como legislador: cumplir y hacer cumplir la ley; dejando a la población expuesta a un ambiente de ilegalidad y violencia donde el Estado de Derecho no existe, con tal de tener los reflectores encima y venderse como un luchador social.
Sin embargo, Yo si soy Colima puntualizó que la única lucha que promueve y encabeza es en contra de las instituciones, junto a Luis Humberto Ladino, también candidato al Senado, quienes han sido exhibidos empujando y golpeando a elementos de la Policía Federal.
“Es una desgracia que Nabor Ochoa y Luis Ladino utilicen protestas ciudadanas para obtener fama y votos y así mantenerse en el poder”, enfatizaron los integrantes de Yo sí soy Colima.
La pregunta para la reflexión, dijeron es ¿a qué intereses sirve, a los de Guerrero, de Jalisco, de Colima o personales?
En este contexto, sostuvieron que no y descartan que en un futuro es probable que la gente lo vea como candidato independiente, prometiendo el cierre de la caseta Cuyutlán.